Reserve su vuelo a Malta

En Malta, es fácil tropezar con edificios históricos, pero uno de los mejores tiene que ser la Catedral de San Juan. Que no le engañe su exterior relativamente modesto, en su interior encontrará un edificio magnífico que le dejará sin aliento. Los murales son extraordinarios, pero también debería mirar hacia abajo, ya que el diseño complejo del piso de mármol es sorprendente y se ha ganado el elogio de "el suelo más hermoso del mundo". 

Diríjase a los jardines Upper Barrakka, al sur de la península, para disfrutar de sorprendentes vistas del puerto y su entorno apacible. Si busca un ambiente más culto, el teatro Manoel es encantador y uno de los teatros más antiguos de Europa que aún presenta conciertos de música clásica y obras de teatro y comedias musicales navideñas para toda la familia. 

El palacio del Gran Maestre domina la ciudad. A pesar de que en la actualidad alberga el despacho presidencial y el parlamento maltés, sus salones se abren al público en determinadas ocasiones y son majestuosos. En el palacio no olvide visitar la Armería de los Caballeros, donde aprenderá sobre los Caballeros de San Juan, que tuvieron gran influencia en el desarrollo de Malta.

La manera más fácil de relajarse y descansar en su viaje en Malta es pasear tranquilamente por las murallas de la ciudad.. No olvide llevar su cámara ya que las vistas desde la península sur son excepcionales, especialmente al atardecer. 

Si busca un poco de pompa y ceremonia, visite Saluting Battery a mediodía y a las 4 de la tarde, momento en que se dispara un cañón naval restaurado para marcar la hora. Este ruidoso entretenimiento le encantará a los niños.

Si es fanático de Juego de Tronos, podrá realizar un tour y ver algunos de los sitios que han servido de telón de fondo a una de la series de televisión de fantasía más famosas del mundo. Otros tours le llevarán a la villa de artesanos Ta Qali, a las catacumbas de Rabat y los asombrosos acantilados de Dingli.

El vínculo de Malta con el mar es poderoso por lo que es sencillo contratar un bote para ir a pescar o simplemente holgazanear al sol en un yate mientras navega alrededor de esta isla pintoresca y accidentada.

Los mejores restaurantes de la capital maltesa se pueden encontrar a lo largo del puerto, y por la noche puede elegir desde cocina de fusión hasta hamburguesas y patatas fritas, pizza y auténticos platos de mariscos. En casi todos los restaurantes se sirve pescado fresco, y también podrá degustar otros platos malteses típicos como el pastel de lampuki (un suculento pastel de pescado), estofado rústico de conejo, bragioli (rollitos de ternera) que se sirve con kapunata (versión maltesa de la ratatouille) y gbejniet, queso elaborado con leche de oveja o de cabra.

Los turistas realizan sus compras en Republic Street, calle peatonal y de ambiente relajado, aunque puede atiborrarse en verano. South Street es excelente si busca souvenirs y baratijas asequibiles o también puede visitar el mercado de Triq il-Merkanti (calle de los comerciantes) que se reúne a diario.